Eugenio Amézquita Velasco
Hace unas horas, revisaba la información a publicar y publicada por Metro News y Guanajuato Desconocido y veía con detenimiento los comentarios colocados por nuestros lectores y seguidores en la nota donde Mons. Víctor Alejandro Aguilar Ledesma, obispo de Celaya habla del respeto que se debe tener a las cosas de Dios y a los lugares de culto.
Algunos de los lectores, tomaron el mensaje del Pastor Diocesano para sí y no dejaron de citar que el comentario iba específicamente señalando alguna parroquia, aunque en verdad, el mensaje era general, para todos y sin dedicatoria a alguien. Es y era un mensaje para todos.
Pero lo que me llamó la atención fue el comentario de una persona que precisó que "la Iglesia Católica está acabada y dando patadas de ahogada".
La frase, además de ofensiva e hiriente para los católicos, está fuera de contexto porque el tema no conecta con el comentario. Sin embargo, la forma de decirlo y hasta escribirlo deja ver que quien lo escriba algo trae adentro que le anda haciendo ruido; con sabor a resentimiento y dolor, causado posiblemente por alguna falta de testimonio de algún miembro de la Iglesia o, el enojo porque -como sucede muchas veces- no se cumplieron los caprichos al quejoso y la Iglesia Católica no le fabricó ni le respondió gustosa a sus deseos: "quiero un dios a mi medida".
Con todo, la frase es ofensiva y más que contra la Iglesia, contra los sentimientos religiosos de las personas. la Iglesia, desde que nació, con su fundador Jesucristo, ha sido atacada y considerada como secta por parte del pueblo judío de esa época. El Sanedrín vio amenazado el poder que tenía sobre el pueblo y la presencia de Cristo les era estorbosa.
Sin embargo, el asunto, más que para reclamar, echar en cara; sirve para una enseñanza y un aprendizaje y tomamos una reflexión anónima, de esas encontradas al azar en internet, que más que respuesta a ese comentario -que lleva la miseria y las ganas de ofender- es eso, una reflexión para todos.
La reflexión
"Crucificaron a Cristo, lo mataron... resucitó... y la religión cristiana sigue".