Eugenio Amézquita Velasco
-El destacado comentarista de Deporte Bajío, Jorge "El Mota" Barrera, fue el encargado de impartir esta plática ante 30 deportistas del deporte ráfaga, el baloncesto
-Leer la defensa, anticipar jugadas y reconocer oportunidades marca la diferencia entre buenos y grandes jugadores.
-La toma de decisiones impacta en el rendimiento ofensivo, la cohesión de equipo y la solidez defensiva.
-Entrenar con escenarios reales y fomentar el análisis refuerza el pensamiento estratégico dentro y fuera de la cancha.
Jorge "El Mota" Barrera, reconocido basquetbolista en la época de los años 90´s y exjugador del "Linces" del Tecnológico de Celaya; seleccionado celayense y por el stado de Guanajuato, realizó una charla para cerca de 30 jóvenes basquetbolistas, en las instalaciones del PacMan 2025 en la Universidad Latina de México, abordando el aspecto de la toma de decisiones en este deporte, conocido como el "deporte ráfaga".
Señaló que en el básquetbol, cada segundo cuenta y cada movimiento puede definir el destino del juego. Pero más allá de la técnica, es la mente la que toma el control: la toma de decisiones se convierte en el motor que da sentido a cada pase, cada corte, cada tiro. Lejos de ser un simple acto reflejo, decidir bien en la duela requiere comprensión táctica, visión periférica y una agudeza mental que no se improvisa.
Puntualizó que desde leer con rapidez la defensa rival, hasta anticipar los movimientos de compañeros y oponentes, reconocer oportunidades con precisión y tomar acciones estratégicas según el marcador y el tiempo restante, cada decisión afecta directamente tanto el desempeño individual como la sinergia colectiva del equipo.
¿El reto? Formar jugadores con conciencia espacial, capacidad de análisis y disposición a aprender del error. Los entrenadores juegan un rol crucial creando ejercicios que simulen escenarios reales, fomentando la retroalimentación y el aprendizaje continuo, y sobre todo, generando un entorno donde errar sea parte del camino, no un obstáculo, indicó.
Al final, quien domina la toma de decisiones en el básquetbol no solo hace mejores jugadas: hace mejores equipos. Porque pensar bien... también es jugar mejor, finalizó.
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